1976 es un año muy recordado en el Mundo Talleres. La gira por el Zaire (hoy República Democrática del Congo) fue un suceso inolvidable y además fue un año con algunas particularidades en la indumentaria del equipo.
En Talleres sabemos que las camisetas no son solo camisetas. Son postales de historia, algunas se imprimen en la memoria colectiva por los títulos, otras por los jugadores que la vistieron, y hay algunas que, aunque se usaron una sola vez, se quedan en la memoria como un curioso recuerdo.

(Imagen de archivo: Gustavo Farías)
La camiseta negra con franja naranja es una de esas joyas escondidas. Una rareza que se lució por única vez allá por el invierno de 1976, y que hoy recordamos como lo que fue: una de esas decisiones que cambian el rumbo de un partido… y de paso, se ganan un lugar en el museo sentimental del hincha Matador.
El día que vestimos de negro y naranja
18 de julio del ’76. Talleres jugaba contra Racing de Nueva Italia. En esa época, los cambios de camiseta eran más por necesidad que por marketing, y como Racing también usaba la celeste y blanca, había que evitar confusiones. La primera idea fue salir con una camiseta azul con una «V» azul parecida a la de Vélez. Dicho y hecho Talleres se vistió como el Fortín. Pero no fue buena idea. Desde la tribuna, costaba distinguir quién era quién. Y el primer tiempo terminó con un 0-1 que no gustó ni a los jugadores ni a la hinchada.
Entonces, en el entretiempo, pasó algo inédito. El equipo salió a jugar el segundo tiempo con una camiseta totalmente distinta, negra con una franja vertical naranja que cruzaba el pecho. Una casaca inédita, nunca antes usada y, hasta el día de hoy, difícil de encontrar.
Fue ponerse esa camiseta… y cambiar la historia. Con goles de Luis Ludueña y Víctor Binello, dimos vuelta el partido y ganamos 2 a 1. Una remontada histórica, con una camiseta que parecía traer suerte.

(Imagen de archivo: Gustavo Farías)
Una reliquia que vive en el recuerdo
Esa camiseta no volvió a usarse oficialmente, pero los que la vieron en la cancha ese día no se la olvidan más. Los coleccionistas la buscan como una joya perdida. Los más grandes la cuentan como una anécdota.
+ FOTO: Nuestra historia en camisetas:

Nos gusta rescatar estas historias. Porque Talleres no es solo lo que vemos hoy, sino todo lo que fuimos construyendo a lo largo del tiempo.
¿Y vos? ¿De qué otra casaca te acordás?